Por: Víctor Hugo Senise
La nueva forma en que los rateros hurtar dichas piezas es que seleccionan los vehículos mas costosos. La trama se realiza acercándose a estos de forma que no puedan ser vistos y de repente colocan un pequeño “GPS” para rastrear la dirección o trayectoria y ubicar donde terminan parqueados en horas la noche.
El robo incluye la participación de dos ladrones, uno funge como chofer y vigilante, mientras que el otro se introduce debajo del vehículo con equipos ligeros y con una mecha que permite desoldar el catalítico realizan su fechoría.
Senise advierte que estos ladrones andan armados y dispuestos a agredir a sus víctimas en caso de ser descubiertos mientras perpetúan los robos que esta afectando a la comunidad estadounidense.
La semana pasada nuestra prima Arelis Vásquez Senise fue víctima de uno de estos robos de catalíticos en el área del bajo Manhattan en una de las mejores zonas exclusivas donde existen cámaras de seguridad en todos los edificios, lo que demuestra que no existen límites para que estos ladrones rastreros cometan sus fechorías.
