El presidente John F. Kennedy tuvo un romance con una estudiante universitaria, Diana de Vegh de 20 años en ese entonces, de forma intermitente durante años hasta que la dejó, haciéndola sentir utilizada.
Diana, de 83 años actualmente, detalló el romance que, según ella, comenzó en 1958 cuando JFK aún era senador de EE.UU, y continuó durante cuatro años de su presidencia hasta 1962, un año antes de su asesinato.
De Vegh, que contó su historia para Air Mail, dice que Jack se acercó a ella en un acto político cuando aún era estudiante en el Radcliffe College y dice que empezaron a acostarse poco después, supuestamente en su apartamento de Boston o en el Hotel Carlyle de Nueva York.
Dice que se vio envuelta en todo el asunto pero a medida que pasaba el tiempo y JFK se involucraba más en la política (y eventualmente en una carrera presidencial), Diana dice que lo veía cada vez menos, y que John comenzó a apartarla de su vida, esto mientras salían a la luz los rumores de varios otros romances en el mismo período, que de Vegh admite que la pusieron celosa en ese momento.
Después de un último encuentro en su casa de D.C. o en el Despacho Oval después de que JFK descubriera que estaba trabajando con su padre banquero para el asesoramiento político y una vacilación que ella dice haber percibido, de Vegh dice que no volvió a verle. Un año después, el presidente fue asesinado.
De Vegh dice que no había nada particularmente especial en la relación. Sugiere que era sobre todo una charla, una dulce charla vacía de él, algo de sexo y luego la enviaba a casa. Por supuesto, todo esto ocurría mientras Jack estaba casado con Jackie, algo que de Vegh dice no haber sabido en ese momento, porque él nunca sacó el tema.
